Un ballet de novela
en San Petersburgo

Dostoievski y el ballet ruso

Bruna y Jac han viajado a la Rusia del s.XIX y han aterrizado el Globus en la Plaza del Palacio de San Petersburgo, vestidos con las ropas tradicionales rusas.

¡Jac lleva la camisa kosovorotka
y Bruna el vestido sarafán!

Justo había un teatro precioso con dos bailarinas en la puerta.

¡A lo mejor estaban a punto de actuar!

Los dos hermanos y Fritz se lo han preguntado y las bailarinas han respondido cabizbajas:

"No, hoy no podemos ensayar
porque el pianista está enfermo..."

Jac ha mirado hacia atrás y ha visto a un hombre que le sonaba. Se ha acercado y lo ha reconocido, entonces ha exclamado:

"Es Fiódor Dostoyevski,
¡un escritor muy famoso!
Pero... ¿Qué hace aquí?"

Resulta que había perdido la inspiración para escribir un nuevo libro y había salido a la calle a tomar el aire.

¡Jac ha tenido una idea! Le ha pedido a Dostoyevski que fuera al teatro con su máquina de escribir y así se ayudarían unos a otros.

Dicho y hecho.

Han entrado todos en la sala de ensayos de las bailarinas del teatro, un salón majestuoso con detalles dorados, unos ventanales inmensos y unas lámparas llenas de espejitos que hacían que brillase toda la habitación.

Dostoyevski se ha quedado tan asombrado que, de repente, le ha venido la inspiración y se ha puesto a escribir sin parar. De pronto, Las teclas han empezado a sonar.

¡Era mágico! ¡Las letras se estaban
transformando en notas musicales!

Haz clic para ver cómo se transformanlas letras en notas musicales!

Entonces las bailarinas han empezado a bailar el ballet “El lago de los cisnes”.

¡Lo hacían de fábula!

Bruna y Jac se han sumado y, animados por la música, las han imitado. Ahora un salto, ahora una vuelta entera, ahora una pirueta...

¡Hasta Fritz bailaba!

¡Y lo hacía muy bien, tenía mucho arte!

¡Haz clic para ver cómo bailan!

De repente, Fritz ha parado de bailar y ha abierto los ojos como platos.

¿Qué le pasaba?

Había visto un cisne muy grande que aparecía dando un salto en medio del escenario. Fritz estaba hecho un flan y ha corrido a esconderse entre las piernas de Jac, él le ha preguntado:

"¿Qué te pasa, Fritz?"

Pero Fritz no ha respondido y se ha tapado los ojos con las dos patas.

La música se ha suavizado y Fritz se ha destapado los ojos. En ese momento ha visto que el cisne se quitaba la máscara y que en realidad no era un cisne sino una de las bailarinas.

Ji,ji,ji

¡Se había asustado sólo por un disfraz! Fritz ha empezado a bailar de nuevo.

De pronto, la bailarina se ha vuelto a poner la máscara de cisne. Y Fritz poco a poco se le ha ido acercando. La bailarina le ha cogido suavemente con la palma de la mano y se lo ha puesto en el hombro y ha continuado bailando. Entonces, la bailarina ha hecho un salto larguísimo, casi de un extremo a otro de la sala, y Fritz se ha agarrado bien fuerte a las plumas de la espalda del cisne para no caerse.

¡Qué divertido,
Fritz tenía la sensación que volaba
y no podía estar más contento!

Al final, todo ha salido perfecto: las bailarinas han ensayado y Dostoyevski se ha inspirado para su nuevo libro.

Cuando los dos hermanos y Fritz se han despedido y ya estaban a punto de elevarse con el Globus, Dostoyevski les ha regalado la novela que había escrito.

¡Qué honor,
serán los primeros en leerla!